Como ya comentamos en el post anterior el nuevo año trae nuevos propósitos. El que nos encontramos en consulta, es el de perder peso. Un buen propósito para las personas que sufren sobrepeso u obesidad o han ganado unos kilos de más durante los últimos meses/años. Este objetivo de pérdida de peso suele plantearse de forma errónea, solo centrándose en los números de la báscula sin tener en cuenta otros factores. Es importante perder un determinado peso durante los próximos meses, pero más importante aún es adquirir un hábito alimentario saludable que lo disfrutes.
El peso corporal cambia por diversos motivos: estrés, falta de sueño, trabajo, estudios, lesiones, actividad física… Esto lleva a que todas las semanas no pierdas el mismo peso, no varíe e incluso depende del momento aumente. Es difícil mantener una pérdida de peso lineal, ten en cuenta otros parámetros además del peso para valorar el logro de tu objetivo.
Como hemos comentado crear un hábito alimentario saludable es imprescindible para la pérdida y mantenimiento de peso. Aquí van unos consejos que te pueden ayudar a conseguirlo:
Establecer una rutina: organiza y planifica la compra y menú semanal. Tener la fruta en el frutero, las lechugas en la nevera y los yogures natural facilitará poder llevar una alimentación más saludable.
No correr: ir poco a poco, hacer muchos cambios de golpe no suele tener buenos resultados. Hacer pequeños cambios durante la semana puede facilitar la adaptación y mantenerlo a largo plazo.
No restringir: se puede llevar una vida saludable, teniendo momentos que no lo sean. Disminuir los momentos no saludables, aumentando los saludables puede ser un buen objetivo para empezar con el cambio.
Ser consciente de cuando hacemos un cambio y funciona. Felicítate.
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